Probiótico Bacillus subtilis natto DG101
Marca: Kyojin
Presentación: envase de plastico gotero de 60 ml.
El probiótico kyojin contiene a la bacteria Bacillus subtilis natto DG101 (denominada originalmente Bacillus subtilis natto RG4365). Esta bacteria fabrica numerosas sustancias beneficiosas y produce diversos efectos saludables. Por ejemplo, produce vitamina K2 (menaquinona-7 o MK-7) que es una vitamina importante para la correcta distribución del Calcio en el organismo, la protección de los huesos (contra fracturas y osteoporosis), el corazón y el cerebro. Produce nattoquinasa (proteasa perteneciente a la familia de las subtilisinas) que ayuda a prevenir la formación de trombos, colabora en el control de la presión sanguínea, disminuir el riesgo de accidentes cardiovasculares, e in vitro degrada al péptido β-amiloide (asociado a la enfermedad de Alzheimer) y gliadina (asociada a la enfermedad Celíaca). Produce PQQ (pirrol-quinolina-quinona) anti-oxidante, que ayuda a mejorar el perfil lipídico, la memoria y combatir el cansancio, el estrés y obtener un sueño reparador. Produce PhrC (o CSF, péptido para la comunicación intercelular) que en estudios científicos in vitro y en modelo animal ayuda al mantenimiento de la homeostasis o equilibrio proteico contra la proteotoxicidad, protegiendo a las neuronas. Produce un biofilm beneficioso que en estudios científicos en modelo animal demostró ayudar a la correcta colonización (eubiosis) del intestino, aumentando la proporción de bacterias lácticas benéficas, la producción de PhrC y óxido nítrico. Produce antimicrobianos naturales (lipopéptidos) efectivos contra hongos, virus y bacterias patógenas. Interfiere con la adherencia de bacterias patógenas a través de un mecanismo de exclusión competitiva. Estudios científicos en modelo animal e in vitro demostraron además que: aumenta la producción de anticuerpos, refuerza la inmunidad innata (sistema del complemento) y la inmunogenicidad de vacunas (efecto adyuvante); disminuye la formación de agregados de α-sinucleina, protege neuronas dopaminérgicas y ayuda contra la toxicidad del péptido β-amiloide (enfermedades de Parkinson y Alzheimer); protege contra el daño cognitivo en animales de investigación como modelos de estudio de las enfermedades de Parkinson y Alzheimer; regula la vía de señalamiento ILS de péptidos similares a la insulina brindando una mayor expectativa de vida sana (efecto antienvejecimiento o prolongevidad saludable). En personas diabéticas ayuda al control de la glicemia, la insulinemia y el sobrepeso.
Más allá de estas características, los probióticos en su totalidad (tanto Lactobacillus, Bifidobacterias y Bacillus) no son medicamentos y no están destinados a prevenir, tratar ni curar enfermedades. Los probióticos pueden considerarse alimentos funcionales, es decir alimentos saludables que más allá de su aporte nutricional contribuyen o ayudan a mejorar la salud de las personas.